Retornos de lo no dicho -En torno a la revista fri(x)iones–
Miembro de la Asociación de psicanálisis de Misiones (A.P.M). Coordinadora del Seminario anual de la A.P.M. Docente de la delegación Posadas del IOM2 y responsable del RING!- el despertar de cada Uno en Red, Boletín virtual de la Red AAPP.
En este artículo, efecto de la presentación de la revista Fri(x)iones -entre el psicoanálisis y la cultura- en las XIX Jornada anual de la Asociación de Psicoanálisis de La Plata, se plasma una política del psicoanálisis en lo que refiere a las publicaciones. Dialogar con el otro de la ciudad a partir de una interpretación de lo que no marcha, de los modos de retorno de lo no dicho o de lo que se deja de lado.
Revista hecha desde la ciudad de Posadas, desde los ecos regionales que inciden en el modo de presencia del psicoanálisis, su tercer número es contado por la autora a partir de un recorrido a la vez táctico, estratégico y político por algunas de sus páginas. La fri(x)ión se produce en torno a las construcciones de la identidad, a 60 años de la provincialización de Misiones. La (x), lo que parcialmente se despeja, surge a partir de las equívocas relaciones con esa otredad que habita desde hace siglos esta tierra: la lengua mbya–guaraní. El lector atento, señala Lorena Danieluk, leerá el contraste entre la presencia viva de una lengua, de sus costumbres y su cosmovisión en el bautismo y la bendición de los frutos, y la versión acriollada y conjugada en tiempo pasado de los mitos y leyendas de la región, denominada guaraní.
Presentación de una presentación, considero importante el acento puesto en la dimensión política que habita la revista, la cual se plasma en sus corresponsalías y en quienes colaboran en este número, señalados por la autora. Permite ver los precursores, los efectos de parodia pero también los horizontes de una publicación que deja leer en sus páginas un modo de entender el psicoanálisis y su lugar según el contexto y la época que le hace un lugar.
Christian Gómez
Introducción
Fri(x)iones tiene que ver con una estrategia para estar y conversar con la cultura. Es la preocupación y ocupación de quienes integran su staff: Christian Gómez (Director), Enrique Acuña (Asesor), su comité de edición: Martha Bordenave, Claudia Fernández, Adriana Gómez, Rodrigo Cibils y quienes participamos con artículos.
A propósito de las VIII Jornadas de la Asociación de Psicoanálisis de Misiones (APM), tomé para el trabajo que presenté en aquella oportunidad un párrafo de un texto de los historiadores Etorena y Freaza (quien publica en esta oportunidad en Fri(x)iones) que considero que viene bien en esta ocasión; Historia de Posadas, es el libro en donde se puede leer cierta idea de que Posadas se presenta como ciudad que posibilitó que cada quien encontrara su lugar (en 1869), desarrollar una vida nueva y digna, tierras que podían comprar o solicitar en merced, cultivarla, criar ganado, comerciar, ejercer artes y oficios, cubriendo todas las necesidades de un pueblo nuevo… por su posición geográfica de enclave fronterizo entre Argentina, Paraguay y Brasil, la ciudad también fue seguro refugio de exiliados y perseguidos políticos que en la nueva ciudad debieron tolerarse y aceptarse… (Obra citada, pág. 337)
El párrafo antes citado, puede hacer pensar en el hecho de que un lugar que se presenta con estas características, donde hay lugar para todos o donde todo entra, puede más bien reflejar exactamente lo contario: no es posible ingresar nada.
El múltiple interés del psicoanálisis, decía Freud en un texto,-El interés por el psicoanálisis (1913)- refiriéndose a la importancia e interés que puede tener el psicoanálisis para otras disciplinas, punto nodal en tanto el psicoanálisis es un producto de la cultura y a la vez efecto de la ciencia, recogiendo lo que ésta segrega (el sujeto).
El psicoanálisis, entonces, no será asimilado por la cultura. Funciona más bien como cuerpo extraño y ajeno a ella, como síntoma, disonante, paradójico. Esto, que enuncio como horizonte, se pone en juego en este tercer número de la revista.
Lo múltiple
En ese cruce pueden leer, en la sección Huellas, la entrevista realizada a Héctor Jaquet –historiador, antropólogo, investigador local – “La invención de la Misioneridad”, donde, no sin resonancias analíticas, explica esta supuesta identidad misionera: primero se crea, dice, el sentimiento provincialista o misionerista como un constructo simbólico, a lo que refiere como la invención de Misiones; sobre la que después se crea el estado nacional (1953). Se rescata a Andresito, personaje que había sido denostado por la historia oficial correntina y había sido negado u omitido por la historia oficial nacional. Entonces convierten a Andresito en Prócer, héroe misionero. De este modo se construye la historia, oponiéndose a la historia oficial.
El producto de esa politización de la historia, según Héctor Jaquet, fue la creación de algo mucho más profundo que un relato histórico, crearon una identidad oficial para el territorio con la que aún lidiamos y que aún vertebra nuestro campo de percepción simbólica.
Por otra parte, el artículo de Enrique Acuña –psicoanalista- “Los nombres de Ñande Rú –bautismo y bendición en los Mbya-”, a mi parecer procede a la inversa, muestra lo que una cultura puede tener de parentesco con el psicoanálisis en tanto modo en que se relacionan con las palabras y el lenguaje. El autor, al explicar el ritual del bautismo y el de bendición de frutos, muestra cómo por medio de ese rito hay la posibilidad de encarnación del nombre, cuestión nodal que determinará una vida. Leo dos fragmentos del artículo mencionado: “… El acto de nominación es decisivo tanto para fabricar la persona mbya como para mantenerlo lejos de la vida imperfecta (…) después de la nominación, el niño se construye como persona, gente, es un verdadero mbya; anudando el organismo con un significante que organiza el cuerpo como armadura simbólica”. El nombre une alma y cuerpo a la vez que lo ubica, le da un lugar en la comunidad.
El síntoma
El texto de Adriana Gómez “Mitos y Leyendas, la experiencia y la identidad”, refiriéndose a estas construcciones sociales del mito y la leyenda, cuestiona la idea de identidad entendida como lo que hace conjunto, para oponerla a la experiencia como el recorrido de cada uno, propia al psicoanálisis. Se orienta con Giorgio Agamben, quien en su libro Infancia e historia –destrucción de la experiencia y origen de la historia – referirá a la experiencia como puro silencio, mientras que la historia es el relato que se hace de esa mudez, por lo tanto la experiencia como tal es irrecuperable. En ese sentido dirá que el mito está en serie con la experiencia, en tanto, siguiendo a Levi – Strauss, el mito está en el lenguaje y al mismo tiempo más allá de él. El mito se sitúa entre la lengua y el habla.
Por su parte, en su texto “Literatura provincial ¿identidad misionera?” Fernando Kluge revisa la cuestión de la identidad a la luz de la literatura regional y pregunta si hay algún elemento que haga misionero a un escrito de un autor que habita estas tierras, con la lupa actual de lo global, por lo tanto de lo que trasciende las fronteras de un territorio. Se refiere a Néstor García Canclini, entre otros, para decir que las comunidades en la actualidad se organizan en torno a un objeto de consumo particular más que a un símbolo universal.
Destaca el interés del psicoanálisis por la singularidad y halla un punto de contacto con la literatura, en tanto algunas veces hace estallar la totalidad o el sentido común de las palabras.
En este contexto actual de interculturalidad, un primer paso sería la aceptación de la diversidad cultural. Para ello, necesariamente el contexto debe ser de políticas horizontales, es decir que no sea solamente un sector el privilegiado; luego, y como efecto habría lo inter, entre culturas, habría identidad. Este proceso que intenta gestionar un modo de vivir puede ser aplicable a cualquier cuestión que ponga de manifiesto la diferencia. Por lo tanto, se puede pensar que la pretendida interculturalidad es más bien un intento de anular las diferencias y homogenizar, ahora bajo este significante. No sería por lo tanto tan raro que la respuesta sea un retorno de las particularidades, es decir el resguardo y la reafirmación de cada cultura.
La política en juego
En consonancia con una política de red e intercambio, este número de Fri(x)iones muestra también algunas de las conexiones que se han realizado a lo largo del año, con las visitas de Fátima Alemán y Daniela Ward. Presencias reales que dan cuenta de la conversación con la Asociación de Psicoanálisis de La Plata, como así también el año de trabajo: V Encuentro del Psicoanálisis con la Historia y la Cultura, VIII Jornadas anuales de la Asociación de Psicoanálisis de Misiones y la continuidad del seminario dictado en la ciudad de Oberá.
Para finalizar, quiero referirme a algo de lo que Christian Gómez, director de la publicación, escribe en la editorial, titulada “Fronteras, territorios, lenguas”. Se refiere, siguiendo a Freud y Lacan, a la cultura no como lo estético sino más bien como una acción simbólica sobre lo real con fines, entre otros, de domesticación y conquista. Acción que nunca será total, siempre fallida, dejará un resto no captado en la misma, operación que interesa en tanto eso no asimilado retorna. Allí la importancia del dispositivo analítico que le hará un lugar.
Pues bien, Fri(x)iones, al modo del psicoanálisis, efecto de la intención de difusión del mismo en la región pero también objeto extraño, no asimilado por ella, pretende conversar y a la vez leer entre líneas eso que no marcha.
En ese sentido, este tercer número de la revista polemiza, discute, enseña. Hay entonces la historia oficial y los efectos de retorno de lo que ella no dice, posibilidad para que este discurso –el del psicoanálisis – y su práctica habiten la ciudad cultural más allá de las captaciones de las modas terapéuticas, literarias o políticas.
Notas:
(*)- Presentación de la revista: Fri(x)iones N° 3 en la XIX Jornada Anual de la Asociación de Psicoanálisis de La Plata, “B(y)ografias – desierto de lo real y sed de sentido”, llevada a cabo el 6 de diciembre de 2013. Ciudad de la Plata.